Un paso más para que las obras en el cuartel de la Guardia Civil en la Argentina sean una realidad. El Ministerio del Interior ha adjudicado el proyecto de reforma y adecuación de las instalaciones que antes ocupada la policía nacional a la empresa Construcciones Campo Extremeño S.L., con sede social en Badajoz. Por el momento, la entidad adjudicataria no ha facilitado a este diario la fecha prevista para el inicio de estas actuaciones.

El Boletín Oficial del Estado (BOE) hizo público el pasado 2 de enero el anuncio de formalización del contrato de obras, con un importe total de adjudicación de 276.103,25 euros, lo que se traduce en una reducción de hasta un 32% con respecto al presupuesto base de licitación, que ascendía a 405.944,07 euros. En esta línea, cabe destacar que en el anuncio para la licitación de las obras se contemplaba un plazo de ejecución de seis meses.

Con la salida a licitación de estos trabajos de rehabilitación, el gobierno central retomaba un proyecto que llevaba varios años a la espera de llevarse a cabo. El cuartel de la guardia civil se encuentra actualmente en las instalaciones de la academia de tráfico, mientras que las dependencias que se van a acondicionar para su traslado se ubican en el edificio que hace dos años cedió el consistorio en la calle Marco Agripa, donde antes se ubicaba la comisaría de la policía nacional.

Una vez hayan finalizado las actuaciones, en las nuevas dependencias se instalarán el Puesto de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, la Plana Mayor de la Compañía Territorial de Mérida, el Seprona, Intervención de Armas y la Policía Judicial de la Guardia Civil. En la Escuela se quedarán los efectivos de Tráfico y la academia de formación. De esta forma, el inmueble solo albergará dependencias oficiales y no viviendas, tal y como la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) de Badajoz ha reclamado en los últimos años.

El Ayuntamiento de Mérida cedió en 1962 los terrenos para que el edificio fuese el cuartel de la policía nacional y estuvo en funcionamiento durante más de 50 años, hasta que Interior se lo devolvió al consistorio y en julio de 2011 se comenzó a estudiar su nuevo uso. En mayo de 2012, el edificio fue entregado a la comandancia de la guardia civil, momento en el que se iniciaron las gestiones para el traslado de las instalaciones. Tras un parón de dos años, las gestiones para el traslado se retomaron en el 2014 con la idea de que este estuviera terminado en 2015, aunque finalmente no se cumplió la previsión.