Cinco chiringuitos de madera con terraza para comer; pasarelas, un paseo marítimo con juegos infantiles y pista de voley-playa, aseos, duchas y puntos limpios para reciclar la basura. En contra de lo que se pueda pensar, no es la playa de Regla en Chipiona o la de Matalascañas, muy conocidas por los emeritenses; sino que será la nueva imagen de... Proserpina, que, si los plazos se cumplen, podrán disfrutar los ciudadanos a partir de la próxima primavera.

"Serán playas playas, con arena y pasarelas de madera", insiste la edil de Urbanismo, Estrella Gordillo, que junto al alcalde de Mérida, Angel Calle, presentó ayer el proyecto de adecuación del entorno del lago, entre la presa romana y el museo del agua y que "es el comienzo de la gran obra de Proserpina", matiza Calle, todo ello acompañado por un nueva red de saneamiento de agua, mobiliario urbano e iluminación.

Todos los chiringuitos estarán en el entorno del museo del agua y tendrán una plataforma de madera con pasarelas para acceder a las zonas de playas artificiales. Estos nuevos locales saldrán a concurso público y sustituirán a los viejos establecimientos existentes "que están de forma irregular", comenta Gordillo. Sin embargo, quienes lo rigen tendrán "alguna ventaja" a la hora de acceder a uno de los nuevos, pero "es una concesión administrativa y puede optar cualquiera", para regentar un negocio por un período mínimo de explotación de 25 años.

Las obras las hará la empresa Movens Terra Omnis (MTO) durante cuatro meses por un importe de 850.000 euros, con cargo a los fondos ICO.

Por otro lado, en la margen derecha del lago se han creado tres pasarelas, se han reparado las farolas del paseo perimetral, se han puesto bancos y se prevé crear una zona infantil, asegura el alcalde.