A falta de que el sistema de control de acceso a las zonas semipeatonales del centro mediante cámaras de tráfico comience a funcionar, el número de residentes de las calles afectadas que han solicitado el permiso para circular por ellas asciende a 400. Asimismo, hay un centenar de comerciantes y de empresas que también han facilitado sus datos a la Delegación de Tráfico para poder realizar las labores de carga y descarga.

El plazo para que los interesados soliciten el permiso para circular sin ser multados seguirá abierto indefinidamente. En cualquier caso, el sistema aún no ha comenzado a funcionar. Según indica el concejal de Tráfico, José Fernández, se está a la espera de que la empresa que ha instalado el sistema, sufragado con los fondos del Plan E, programe el software que conecta las dependencias de la policía local con las 14 cámaras instaladas. Estas están repartidas en dos zonas, una de ellas en el entorno de la plaza de Santa María y la Asamblea de Extremadura, y la otra en José Ramón Mélida y la Puerta de la Villa.

El Grupo Municipal Popular, de la mano del concejal Francisco Miranda, explicó ayer los motivos por los que se abstuvo de votar las normas que regulan el acceso a estas zonas en la Comisión Informativa de Policía, Tráfico y Seguridad Ciudadana, que se celebró el pasado 17 de septiembre. Según Miranda, los populares no apoyaron la medida porque no tuvieron tiempo para estudiar la documentación entregada, y porque cree que este sistema "tiene un tufillo a medida recaudatoria".

El concejal de Tráfico replicó que se entregó la documentación con una semana de antelación, y niega el afán recaudatorio porque, según indica, las señales instaladas advierten claramente que está prohibido circular por estas calles salvo las personas autorizadas.

Además, dijo que cuando llegue el software se iniciará un periodo de pruebas de dos o tres meses, y que después se informará a los conductores para evitar dudas.