POR CARMEN HIDALGO

La ciudad de Mérida es un lugar bastante asequible para el bolsillo de los visitantes. El museo Abierto y El Costurero son cien por cien gratuitos para el turista, así como buena parte del conjunto monumental emeritense, pues su localización en plena vía pública convierte su visita en toda una ganga. Sin lugar a dudas el turismo se configura como uno de los motores económicos principales de la capital autonómica, de ahí la importancia de acercar el patrimonio cultural al viajero. Y es que pagar doce euros por visitar los monumentos más singulares de Mérida o tres euros por conocer la grandeza de las colecciones del Museo Nacional de Arte Romano es un chollo.