La sociedad Mercasa, encarga del estudio de la reforma de los mercados históricos, y los vendedores del mercado de Calatrava han alcanzado un acuerdo que fructificará tras las vacaciones de Navidad, según ha anunciado el alcalde de Mérida, Angel Calle.

La empresa estatal Mercasa prevé la construcción de un establecimiento de cuatro plantas con dos pisos subterráneos, uno para la carga y descarga y otro con un aparcamiento que usaría el público que acuda a comprar.

La Asociación de Comerciantes de Mérida ya mantuvo contactos con Mercasa y de ahí salió un esbozo de lo que podría ser el mercado, un edificio de cuatro plantas, dos de ellas subterráneas para aparcamientos, con supermercado y tiendas de modas, y la conservación de los actuales negocios. Además abriría por las mañanas y por las tardes. El presupuesto rondaría los 12 millones de euros.

La idea es modernizar el mercado, y que además de contar con las tradicionales carnicerías, pescaderías y fruterías, tendría otro tipo de negocios, a los que se dotaría de internet y la posibilidad de pagar con tarjetas.

El Ministerio de Vivienda pagaría el 75% de la obras y el resto el ayuntamiento.