El Ayuntamiento de Mérida está buscando interesados en financiar con publicidad el préstamo de bicicletas, que se suspendió en enero por no poder asumir el consistorio los 28.000 euros anuales que precisa su mantenimiento. El delegado de Tráfico, Manuel Balastegui, explica que ha contactado con varias empresas para ofrecerles esta posibilidad, aunque por ahora no ha recibido respuesta. El servicio contaba con más de 2.000 abonados, aunque según el consistorio solo unos 25 lo utilizaban de forma habitual.

El préstamo de bicicletas arrancó en octubre del 2009, a través de la colaboración con la Junta de Extremadura, que llevó la iniciativa a las principales ciudades de la región. Según Balastegui, en enero del 2011 el ayuntamiento emeritense, entonces gobernado por el PSOE, firmó un contrato con la empresa adjudicataria del mantenimiento de las nueve bases de la ciudad y el centenar de bicicletas por 113.000 euros durante dos años. Tras el cambio de gobierno, el consejero negoció en el 2012 una rebaja de este contrato a la mitad, para que en vez de pagar unos 56.000 euros anuales, el consistorio liquidara 28.000.

Ahora, ante la imposibilidad de mantener este gasto por la complicada situación financiera del consistorio, Balastegui propone que alguna empresa pueda asumir este coste de mantenimiento, a cambio de publicitarse en las bases y en las propias bicicletas. "Son tiempos difíciles, pero hay que buscar alternativas para intentar no perder un servicio que nos gustaría mantener".

Sin embargo, por ahora, no lo ve posible, y en todo caso advierte que a pesar de que el préstamo contaba con más de 2.000 abonados, durante el año pasado se efectuaron 9.200 préstamos, lo que supone unos 25 al día. De ahí, deduce que ese era el número aproximado de usuarios: "Cada uno le costaba 1.131 euros al consistorio, o sea, una locura".