El grupo municipal de Mérida Participa (Podemos) avanzó ayer que votará en contra de la «privatización» del espacio del Mercado de Calatrava, que será propuesta por el equipo de gobierno local a la Comisión Informativa de Patrimonio. A través de una nota de prensa, el grupo expresa su temor de que el gobierno local «elimine la posibilidad de que cualquier ciudadano pueda concurrir a esa gestión en una condición de igualdad de oportunidades».

Tras recordar que el proyecto del gobierno municipal es reconvertir el mercado en un centro gastronómico, el portavoz del grupo, Ramón Carbonell, afirma que las razones dadas por el gobierno local para acometer dicho proceso es fruto del abandono municipal de las instalaciones. El concejal sostiene que entre esas razones figura «la infrautilización de los puestos, degradación de las instalaciones, condiciones higiénico-sanitarias deficientes, escasa venta al público y deficitario para la Hacienda local».

El alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, destacó ayer que «no habrá privatización» en el mercado, pero sí una propuesta para que quienes usan este espacio para sus respectivos negocios paguen los costes de luz, agua, limpieza y mantenimiento. «¿Por qué tenemos que pagar estos costes a los empresarios?», se preguntó Osuna, después de afirmar que las personas que venden sus productos en el mercado «se llevan los beneficios a su casa».