Las pinturas encontradas en un solar de la calle Parejos serán accesibles para el público, que las podrá ver a través de un mirador, con una puerta y una gran cristalera, según el proyecto que contempla el Consorcio. El director de la institución, Pedro Mateos, explicó ayer a este periódico que se intentará que todo esté preparado este mismo año.

Se trata de pinturas de la segunda mitad del siglo I, halladas en una habitación subterránea y en la planta baja del edificio, de grandes dimensiones y con motivos acuáticos, y detalles de vajilla metálica, instrumentos musicales y animales, entre otros, según indicó la coordinadora de documentación de la entidad, Teresa Barrientos.

La fase de restauración de las obras está bastante avanzada después de cuatro años de trabajo, ya que la habitación tiene cuatro metros de altura de pintadas y más de seis metros de anchura, con una segunda planta en decoración en relieve, "y hemos tenido que ir colocando fragmentos de apenas cinco centímetros", pero "los resultados serán espectaculares".

Una de las obras es un zócalo con fondo rojo en el que aparecen patos, juncos, guirnaldas y piezas de vajilla metálica, que también están presente en la habitación más alta, con grandes paneles de fondo amarillo y pintadas de animales e instrumentos musicales.

La especialista argumentó que son obras inéditas en Mérida porque "podemos conocer la tridimensionalidad del espacio".