Miguel Angel Paris dejó ayer de ser el comisario, pero asegura que se va dejando muchos amigos en Mérida.

¿Cómo valora su etapa en la ciudad?

--Han sido dos años que se me han pasado muy rápido, ha sido un período intenso y estupendo. Uno siempre se va con la sensación de haber podido hacer algo más, pero espero volver a Mérida y Extremadura, donde era la primera vez que trabajaba.

Su labor al frente de la Comisaría le habrá servido para calibrar los niveles de seguridad de la ciudad. ¿Es Mérida un lugar seguro para vivir?

--Dentro del nivel español, Mérida es una ciudad muy tranquila, sin problemas importantes de inseguridad.

Pero siempre se ha dicho que Mérida necesita más efectivos policiales.

--En estos momentos hay 34 vacantes y ese sería el número que abría que incorporar.

¿Ha tenido algo que ver su marcha con la petición reitera de los sindicatos para que dimitiera?

--En absoluto, me voy a la Comisaria General de la Policía Científica, donde ya estuve antes de ser comisario. No tiene nada que ver, es lógico que la gente pueda pensar lo contrario, pero vuelvo a Madrid por iniciativa propia.