El hemiciclo de la Asamblea de Extremadura se ha inaugurado con sus señorías sentados, más cómodamente y con una visión más completa. A la salida nos encontramos con un buen póquer político: el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez IBarra, recién operada su madre, de 92 años, de una rotura de cadera y cuya intervención quirúrgica ha salido muy bien; Guillermo Fernández Vara, Consejero de Sanidad y Consumo; Francisco España, exconsejero de Cultura, y el diputado en el Parlamento regional Juan Manuel Rodríguez Tabares.

Salía Mariano Gallego, alcalde de Don Benito, con las mismas prisas de siempre, no para. Lo saludamos a la carrera, y muy cerca de la máxima autoridad dombenitense estaban varios paisanos suyos, el consejero de Agricultura y Medio Ambiente, José Luis Quintana Alvarez, su jefe de Gabinete Pablo Sánchez y el diputado José Luis Viñuelas. Cuatro calabazones de pro. Y muy próximos, departimos sólo unos instantes con José Antonio Jiménez, del Siex, que ha logrado escaño por la renuncia de Manuel Cañada.

Al entrar nos encontramos con el portavoz socialista, Luciano Fernández Gómez, y la nueva diputada popular Mari Luz Calvo, concejala de Asuntos Sociales en el Ayuntamiento de Mérida.

El consejero de Economía y Tabajo, y portavoz del Gobierno regional, Manuel Amigo hablaba con mucho interés con la consejera María Antonia Trujillo. Estaban, quizás por ser el primer pleno, bastantes relajados sus señorías. La policía, un poco mosca porque se había anunciado una manifestación de los afectados por los incendios. La manifestación no llegó a consumarse.

El ambiente que se respira en el comienzo es de optimismo y su nuevo presidente, Federico Suárez, se estrena junto con el hemiciclo. ¿Qué se hará con el anterior?, que era capilla y que en la misma mesa presidencial hay una cripta con los restos de los monjes del hospital San Juan de Dios.