El PP presentó ayer al grupo municipal socialista, en el seno de la Comisión de Limpieza, la nueva ordenanza reguladora del control de los residuos procedentes de obras de construcción, demolición y excavación. El objetivo es adecuar esta actividad a la normativa europea sobre protección del medio ambiente, dando prioridad al reciclado o reutilización de los mismos.

Como la normativa prevé que este servicio se pueda hacer a través de un gestor autorizado, el grupo municipal socialista propuso que lo haga la Gerencia Municipal de Urbanismo "y no pase a manos privadas".

La concejal socialista Estrella Gordillo indicó que si la Gerencia se hace cargo de este servicio se evitaría la duplicación de la burocracia que tienen que poner en marcha los ciudadanos.