Con esfuerzo, pasión y colaboración. Así han logrado salir del bache los componentes de la banda de cornetas y tambores La Pasión de Mérida tras sufrir un robo que les dejó sin más de una veintena de instrumentos valorados en unos 12.000 euros. Los hechos sucedieron el pasado 23 de enero, presumíblemente de madrugada, cuando uno o varios individuos accedieron a su local de ensayo, ubicado en la nave de la antigua ITV del polígono industrial El Prado, y sustrajeron todo tipo de instrumentos. Sin duda, un gran varapalo para los 55 integrantes de esta reconocida banda emeritense que despertó una oleada de solidaridad por parte de numerosas agrupaciones de la región y de todo el país.

«Gracias a Dios tenemos la suerte de que vamos a poder tocar esta Semana Santa porque hay muchísima gente que se ha volcado con nosotros y nos va a prestar los instrumentos, pero habrá que devolverlos después», sostiene el director musical de La Pasión, Juan José Pereira. Afortunadamente, el préstamo de los instrumentos les permitirá no tener que cancelar los contratos suscritos desde hace meses con las hermandades y cofradías a las que acompañarán durante la Semana Santa. «El apoyo recibido ha sido increíble, incluso por parte de quien menos te podías esperar», afirma Pereira, quien destaca que no han querido recibir ninguna colaboración de tipo económico.

Los ladrones se hicieron con toda clase de instrumentos, como cornetas, trompetas, fiscornos, tambores, bombardinos, una tuba y un bombo, al que se suma otro que rompieron. Pereira explica que el robo se centró solo en los instrumentos, ya que en el local de ensayo, que les cedió el ayuntamiento hace poco más de un año, también había otros objetos de valor, entre ellos, una televisión de 52 pulgadas, unos altavoces amplificados, así como la recaudación económica de la barra. «En otras ocasiones hemos tenido incidentes con otras personas y realmente no sabemos qué daño podemos hacer. Si hay una doble intención detrás de todo esto no sabemos el motivo, por ello confío que más pronto que tarde se descubra quién o quiénes han sido los responsables», sostiene. Los hechos están denunciados ante la Policía Nacional, que sigue llevando a cabo una investigación para esclarecer lo sucedido.

Debido al robo, la banda tendrá que acometer una nueva inversión para comprar los instrumentos, lo que impedirá a su vez acondicionar el local o renovar uniformidad. «Al final es como si empezáramos de cero», se lamenta Pereira. Y es que, para mayor desgracia si cabe, el incidente se ha producido coincidiendo con el décimo aniversario que celebra la banda este año, y para el que tenían pensado desarrollar varios eventos extraordinarios.

Pese a todo, la agrupación musical seguirá adelante con sus compromisos profesionales y sus componentes no dejarán de tocar por muchos palos que les pongan en las ruedas. De hecho, hace dos semanas que retomaron los ensayos, por lo que los sones de la banda seguirán marcando el paso firme de sus integrantes con más ‘pasión’ que nunca.