El centro de Planificación Familiar recibe a lo largo del año unas 400 visitas, en su mayoría de jóvenes de 18 años sin distinción de clase social, que van pidiendo más información y asesoramiento profesional de temas relacionados con la pareja y la sexualidad.

Las personas que acuden al centro lo hacen, entre otras cosas para pasar revisiones ginecológicas y para obtener información sobre la píldora del día después.

Cuando los jóvenes llegan a estas dependencias con problemas de posibles embarazos, lo primero que hacen los técnicos es informales sobre los supuestos que marca la ley, así como de las clínicas abortivas.

Actualmente, la píldora del día después está siendo una solución a la que recurren bastantes jóvenes, que en ocasiones no utilizan el preservativo y toman esta alternativa como un método anticonceptivo más, sin reparar en las consecuencias y en las enfermedades que a largo plazo esto puede conllevar.