El plazo medio de pago a proveedores del Ayuntamiento de Mérida ha bajado a los 113 días en febrero, 30 menos que en el mes anterior, cuando alcanzó los 143. La portavoz municipal y delegada de Hacienda, Carmen Yáñez, valoró ayer esta «importante reducción», aunque reconoció que el ayuntamiento sigue fuera de los plazos legales.

Al término de la Junta de Gobierno Local, explicó que esta deuda sigue siendo muy abultada (en torno a los siete millones de euros) porque el ayuntamiento trata de pagar primero a los pequeños proveedores y los empresarios locales, de forma que lo que se arrastra son las facturas de los grandes proveedores (limpieza, electricidad, etc.).

«El periodo medio de pago se ve agravado por no pagar facturas antiguas, pero entendemos que a pesar de que va en contra de las medidas del ministerio, nuestra responsabilidad como gobierno local es no dejar abandonados a los empresarios de la ciudad y pequeños proveedores», afirmó.

En otro orden de cosas, la Junta de Gobierno también aprobó ayer la ampliación del horario de cierre de los locales de hostelería dos horas entre el 7 y el 23 de abril, una medida que se entiende «positiva» debido a la gran afluencia de visitantes que se prevé en Semana Santa.