La corporación municipal aprueba por unanimidad solicitar la creación de un servicio público y gratuito de ayuda a domicilio para personas en situación de dependencia en la ciudad, mediante la aportación de medios por parte del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (SEPAD) y sin costes para el consistorio. Así, los grupos se mostraron a favor de la proposición suscrita por el grupo municipal IU para pedir al organismo dependiente del Gobierno extremeño que instaure este mecanismo en Mérida como ya hace en otras localidades.

La portavoz de IU, Amparo Guerra, explicó ayer en sesión plenaria que hasta la fecha los emeritenses que tienen reconocida su situación de dependencia no pueden acogerse al servicio municipal de ayuda domiciliaria y solo pueden acceder a este servicio a través de una ayuda económica que cubre parcialmente el coste de dicho servicio y que tiene que prestarse a través de una empresa privada. «No existe un servicio público para atender la demanda sin copago», puntualizó la edil.

Cabe señalar que el SEPAD dispone de un servicio de ayuda a domicilio que coexiste con el servicio municipal en varios municipos de la región, lo que permite incrementar el número de horas de ayuda a domicilio en cada una de estas localidades. Según IU, en Mérida supondría multiplicar por diez el número de horas de servicio disponible para la prestación del servicio, hasta alcanzar las 30.000 horas, ya que indica que en la actualidad el servicio de ayuda municipal dispone de 3.093 horas de trabajo.

Por parte del equipo de gobierno, la delegada Catalina Alarcón informó de que hace varias semanas que el gobierno local mantiene reuniones con el SEPAD para «estudiar fórmulas» encaminadas a llevar a término este sercivio con el objetivo de que Mérida «sea uno de esos municipios» que ya cuentan con esta prestación. «Apoyamos la moción porque desde este grupo apostamos por la calidad y el bienestar de las personas», afirmó la edil popular Ana Blanco. En esta línea se expresó el concejal de Mérida Participa, Ramón Carbonell, quien subrayó que «no debemos dejar a las personas mayores en el olvido».

Entre otros asuntos, el pleno guardó un minuto de silencio por los asesinatos machistas antes de la lectura de la declaración institucional con motivo del 8 de marzo, Día Internacional de las Mujeres. Asimismo, el grupo popular retiró la proposición sobre la implantación de un plan plurianual municipal de accesibilidad por no haber pasado por comisión.