El pleno municipal reconoció ayer a la enóloga Isabel Mijares como hija predilecta de Mérida. Según explicó el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, se trata de la primera mujer que recibe este renocimiento en la ciudad, un título que le ha sido otorgado por su trayectoria personal y profesional, «siempre paseando y llevando a gala su condición de emeritense con mayúsculas».
El acto se celebró en el centro cultural Alcazaba y contó con la asistencia de familiares y amigos de Mijares, representantes de diversos colectivos sociales y autoridades, entre ellas el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara. El nombramiento se aprobó por unanimidad de todos los grupos municipales, después de las intervenciones de Rodríguez Osuna y el concejal Pedro Blas Vadillo para recordar la trayectoria de Mijares y su vinculación y apoyo a los actos organizados con motivo de la Capitalidad Iberoamericana de la Cultura Gastronómica el año pasado.
Tras recoger el diploma acreditativo de su distinción, Mijares se mostró muy agradecida por el reconocimiento recibido y aprovechó la ocasión para mostrar una vez más su amor por una Mérida «grande, rica e histórica que hoy me abre sus brazos». «Gracias a la química, el vino y la gastronomía. Gracias a una Mérida que hoy me dice que soy su hija predilecta sin ver más razón para ello que haberla querido», dijo una Mijares muy emocionada.
