La policía local acordonó ayer un tramo de la avenida Lusitania debido a un escape de gas producido por una excavadora que rompió accidentalmente una conducción de Repsol.

La máquina, de la empresa Merkaverde, estaba haciendo una zanja entre el nuevo geriátrico y la avenida Lusitania para conectar con la tubería de gas natural de Gasmer, cuando picó la de Repsol, en la confluencia de la avenida Lusitania con la de Juan Antonio de Vera y Figueroa. Eran las once de la mañana. Afortunadamente, el viento impidió la acumulación de gases.

Enseguida se personaron allí bomberos y agentes de las Policía Nacional y local, que acordonaron la zona y cortaron una carril al tráfico. Además, se llamó a los técnicos de Repsol, en Badajoz, para que arreglaran la avería. La empezaron a reparar a las 12.30 de la tarde.

El responsable de Merkaverde, Juan Peche, explicó que en el tramo entre el geriátrico y la avenida Lusitania, unos 100 metros, "nos hemos encontrado con más de 30 obstáculos entre tuberías, cables de la luz o imbornales".

La avería afectó a 50 familias, de los 400 usuarios que usan este servicio de Repsol para la calefacción y el agua caliente.