El portavoz del PP, Fernando Molina, denunció ayer "la chapuza extrema" que se ha llevado a cabo en San Bartolomé para intentar subsanar "los errores de obras" cometidos en la zona el pasado mes de marzo durante la ejecución del Plan E.
Los populares han manifestado que "al malestar vecinal" por la imposibilidad de plantar nuevos árboles, se une ahora el hecho de que los alcorques han sido tapados con un tipo de baldosa distinto al de los acerados, "por lo que se ha conseguido un esperpéntico juego tricolor que no hace más que evidenciar aún más el remedio".
Por otro lado, Molina también afirma que la aparición de humedades en algunas viviendas a causa de la colocación de imbornales por encima de los acerados "ha provocado ya que una familia haya abandonado la casa que habitaba". Además, señaló que "el gobierno no puede ampararse en la situación climatológica y no buscar soluciones a un mal diseño de obra, porque los problemas están ahí mientras los vecinos tienen que tomar determinaciones como ésta".
Por último, el edil popular advirtió que todos los naranjos provenientes de la calle El Puente "están secos debido a que su trasplante no se hizo correctamente" y que el abandono de material de obras en la zona ha llegado hasta tal punto, "que la gente ha comenzado a llevárselo".
