Las presas de Alange, Proserpina y Cornalvo han perdido en el último año y medio --desde julio del 2004 hasta la fecha-- entre el 16 y el 60% del agua embalsada, aunque las pérdidas han sido muy diferentes en cada una de ellas, según los datos de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG). La situación es más delicada en el embalse de Alange, dado que es el que abastece a Mérida, que en este período su volumen de agua embalsada ha caído un 25%, al pasar de los 694 hectómetros cúbicos embalsados en julio del 2004 a los 527 del presente mes. En cualquier caso, el abastecimiento está garantizado.

Esta presa se encuentra en la actualidad al 61,9% de su capacidad máxima, que es de 851,7 hectómetros cúbicos. Esta caída ha sido especialmente notable en los últimos doce meses, ya que hace justo un año el embalse tenía 641,3 hectómetros cúbicos de agua, y estaba al 75,3%.

La situación también se ha agravado notablemente en la presa de Cornalvo, que en año y medio ha perdido un 60% de capacidad, mientras que Proserpina tiene ahora un 16% menos de agua.