Tan cierto es que Proserpina es romana como que el candidato a la alcaldía de Mérida por el PP es Pedro Acedo.

Juega a darse a valer. Tiene clara su postura. Pide cosas que Carlos Floriano no cede y están los "tiras y afloja" de la política.

El alcalde ha nombrado un Comité Electoral suyo, con incondicionales. Y si se reúnen para nombrar un candidato será el que Acedo le aconseje. Otra cosa es que si el Comité Local aprueba un candidato que no sea Acedo, el Comité Regional lo ratifique, que no lo hará, seguro. Tanto como que a Acedo no le queda otra que seguir como candidato o retirarse de la política, y eso, por el momento es impensable.

Se han reunido en Badajoz, en Mérida, Madrid y seguirán hasta que comprueben que la única salida es la de la candidatura. Floriano sabe que si pierde con Guillermo Fernández Vara la va a tener cruda y hay muchos que esperan el momento para hacerse con el liderazgo de los populares en la región.

Quedan pocos días para tomar una decisión. Se ha inaugurado un nuevo local del PP de Mérida y no se va a abrir algo que no le va a servir a Acedo. Para nada va a abandonar la política. O le dan algo muy bueno, que se lo están negando, o sigue.

Qué parto político nos espera. Qué campaña más larga. ¿Por qué será? Qué tendrá la política que los que entran no quieren salir de ella, bueno Juan Carlos Rodríguez Ibarra ha tardado lo suyo, pero se va y a su puesto de trabajo, con dos cojones y un infarto, pero se soluciona con unas copas diarias de vino tinto con los amigos y si el tinto es bueno, mejor.