El Grupo Municipal Socialista denunció ayer la "persecución personal y profesional" del gerente de la empresa municipal de autobuses urbanos, Prudencio González, hacia un conductor municipal que, según el portavoz socialista, Antonio Rodríguez Ceballos, ha sido despedido "de forma improcedente, sin ningún fundamento ni pruebas documentales".

Rodríguez Ceballos considera que la decisión responde a la intención del gerente de "meter miedo al resto de la plantilla y adoptar represalias a aquellos trabajadores que se atreven a reivindicar y pedir sus derechos".

Además, indicó que es la segunda ocasión en la que González actúa de esta forma, de tal modo que, a su juicio, el ayuntamiento está pagando a un trabajador despedido sin trabajar, ya que la justicia ha declarado improcedente el despido del primer conductor.

Por este motivo, anunció que el PSOE mantendrá una reunión informativa con los conductores de la empresa municipal de autobuses para conocer la situación su situación de trabajo.

En opinión del portavoz socialista, la actitud mantenida por el gerente en este caso "improcedente y lesiva", y matizó que antes de decidir "previamente hay que percibir, abrir expedientes informativos y después un funcionario instructor que escuche a las partes propone una sanción o el sobreseimiento del caso".