El equipo de gobierno municipal iniciará en los próximos días, una vez acabada la feria, los trabajos para ir diseñando los presupuestos locales para el próximo año. Serán unas cuentas nuevas, tras varias prórrogas presupuestarias del anterior ejecutivo del PP, y donde las infraestructuras y las políticas de bienestar social van a ser primordiales, según ha avanzado el alcalde de Mérida, Angel Calle.
Esa mayor inyección económica en medidas sociales se concreta, a modo de ejemplo, en la compra por parte del ayuntamiento de un edificio que albergue el instituto público municipal de bienestar social. Respecto a las infraestructuras, Calle cita como una "prioridad" la mejora de la presión y el caudal de agua en la zona norte --cuyos fallos provoca continuas quejas de los vecinos desde hace años-- e infraestructuras de ese tipo en diversas zonas. A este respecto, en una reciente entrevista con el representante vecinal de la zona norte, el regidor se comprometió a tomar medidas de inmediato para arreglar ese problema.
Tras la feria, van iniciar una ronda de contactos con todos los colectivos de la ciudad (sociales, deportivos y culturales, entre otros) para elaborar unos presupuestos participativos, teniendo en cuanta las necesidades de la sociedad y sus preferencias, explicó el alcalde.
Y ello porque Calle quiere que su equipo de gobierno "no pierda la cercanía con la gente" y le insta a "patearse las calles y hablar con los vecinos", para conocer sus demandas de cerca.
Por otro lado, reitera que en este inicio de curso político el PSOE esta intentando que el clima político de la ciudad sea el de tener adversario y no enemigos, aunque advierte que "no vamos a poner la otra mejilla".
