El grupo municipal socialista ha buzoneado cartas por toda la ciudad en la que muestran su disconformidad por la resolución del caso Gasmer, al considerar que hay muchas incógnitas aún por resolver.

Así, se preguntan dónde están los 180.000 euros que la empresa Iniciativas Emeritenses entregó al ayuntamiento y que se devolvieron a Gasmer; si el gerente avaló préstamos con fondos de Gasmer para empresas privadas y por qué le dieron todo el poder al gerente, "cuando la parte privada sólo disponía del 48% y el ayuntamiento el 52% de las acciones".

En la carta se señala que "Mérida ha asistido asustada a uno de los enfrentamientos más duros de su historia con el caso Gasmer, que inundó de denuncias los juzgados".