El Centro de Refugiados reabre siete años después con capacidad para acoger a 30 personas y a partir de ahora será gestionado por Cruz Roja Extremadura. El consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, recibió ayer las llaves del edificio de la Iglesia Evangélica, propietaria de la instalación. El edificio está disponible para acoger refugiados, pero no hay una previsión, ya que depende del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.