La fragilidad de las viejas tuberías de la red de abastecimiento de Mérida ha vuelto a ponerse en evidencia. En esta ocasión las víctimas son los vecinos de la barriada de La Corchera que, si bien no verán afectado el suministro en sus hogares, sufrirán las molestias de las obras de reparación de una tubería que ayer, en las primeras horas de la tarde, se rompió en el Camino Viejo de Mirandilla.

Se trata de una tubería de fibrocemento de 250 centímetros que no aguantó la presión y que provocó un gran socavón en la citada vía. Los operarios cortaron el tráfico en esta calle, y permanecerá así durante varios días --el ayuntamiento no ha dado ningún plazo-- hasta que la tubería sea reparada.

La vía permanecerá cortada desde la rotonda de la carretera de la Corchera hasta la avenida de José Martínez Ruiz de Azorín. Los residentes de la Corchera pueden acceder a sus domicilios por los dos accesos de la carretera de la Corchera, y quienes procedan de la carretera de Cáceres pueden acceder por la misma avenida José Martínez Ruiz de Azorín. También se rompió la tubería de la calle Oliva de Mérida, pero esta se reparó ayer mismo.