La Concejalía de Sanidad ha tomado la decisión de sacar de río Guadiana a los patos domésticos que viven junto al canal que va al molino de Pancaliente, en un espacio de jardín acotado, como medida de precaución ante la posibilidad que se produzca algún caso de gripe aviaria en Extremadura. Las aves, quince parejas de patos, gansos y ocas, serán trasladadas a partir de hoy a una nave herméticamente cerrada.

El motivo es que Mérida y sus alrededores, con los embalses de Alange, Proserpina y Cornalvo, acoge infinidad de aves migratorias que empezarán a llegar dentro de poco, y alguna puede estar afectada por la gripe aviaria.

Las aves podrán volver en agosto al río, donde de día viven en libertad aunque de noche duermen en cinco casetas de madera dentro de un recinto cerrado desde julio del 2004.

Además, se aprovechará la ocasión para controlar la reproducción de estas aves.

En una nota de prensa, el ayuntamiento afirma que "quiere tranquilizar a los emeritenses en el sentido de que las medidas que ahora se adoptan son tan sólo de precaución".