Mérida

Los tres socios emeritenses que se unieron para hacer una industria fueron: Salvador Ruiz Calero, dependiente de comercio; Evelio Gómez Pijierro, industrial publicitario y durante muchos años el portero titular de la Sociedad Deportiva Emeritense; y Ramón Pérez Gil, agente comercial, crearon, por los años treinta, una sociedad denominada SER, uniendo la primera letra de cada uno de sus nombres.

Esta sociedad se dedicó al negocio de la publicidad, y gestionaba en exclusiva las principales salas cinematográficas de Extremadura: Teatro Cinema Norba, de Cáceres; López de Ayala, de Badajoz; Carolina Coronado, de Almendralejo; Salón Moderno, de Don Benito; Sequeira, de Olivenza; Central Cinema, de Azuaga; Cine Trajano, de Villanueva de la Serena; Calderón de la Barca, en Montijo; y Cine María Luisa de Mérida.

Se publicitaban en el semanario llamado Adelante , de Mérida, en 1935. La palabra SER se inscribió en el Registro de las Propiedad ubicado en la madrileña calle del Carmen, en el número 36.

En este registro se hizo la entrega de la solicitud de una marca de producción y comercio para distinguir toda clase de impresos, facturas, propaganda, y cuantos medios y procedimientos, considere conveniente, en orden a una agencia de publicidad consistente en un dibujo y denominación ´SER´, por Joaquín Carlos-Roca y Dorba, abogado y agente oficial de la Propiedad Industrial, en nombre de Evelio Gómez Pijierro . La petición está fechada el 8 de marzo de 1941.

El coste de la anotación registral de la SER fue de 48 pesetas pagadas en Papel del Estado. La marca presentada es un dibujo integrado en un cuadro, en cuyo interior aparece la figura grotesca y caprichosa de una persona. con las piernas muy abiertas, casi en posición horizontal, en actitud de correr y usando una bocina-altavoz, como medio de propaganda. En la parte inferior de esta figura, la palabra ´publicidad´, y debajo de ella, la denominación ´SER´.

LA COMPRA

Virgilio Oñate Sánchez, ingeniero, vecino de Madrid en la calle Caracas, 19 y como apoderado de la Compañía Anónima Sociedad Española de Radiodifusión y director general de la misma no se pudo registrar esta marca al tenerla el emeritense Evelio Gómez Pijierro.

Se hicieron las gestiones oportunas y se pusieron en contacto para comprarla. Por parte del industrial emeritense estaba D. Indalecio Campos Hoyo, profesor mercantil, vecino de Mérida en la calle El Puente, 17 y con poder notarial de Rafael Valverde. De la otra parte, Virgilio Oñate según poder notarial de Félix Rodríguez Valdés, reunidos todos los interesados el 8 de noviembre de 1941 en proceso de cesión de la marca.

EL IMPORTE

Cedida la marca a la Compañía Anónima Sociedad Española de Radiodifusión, esta tuvo que pagar 20.000 pesetas de las que se recibieron 10.000 cuando se firma la cesión de la marca y la otra cantidad a 30, 60 y 90 días, pagando en las dos primeras letras 3.300 y la última 3.400, vencían el día 15 de mayo de 1941 y en la misma fecha los otros dos meses.

La SER comenzó en Mérida; hoy es una de las empresas más prestigiosas del país.