Suma y sigue. Un total de 90 personas han sufrido una intoxicación alimentaria tras ingerir alimentos de un restaurante de comida china, ubicado en la calle Marquesa de Pinares, mientras que nueve de ellas están ingresadas en el Hospital de Mérida, aunque «se encuentran estables y con el tratamiento adecuado», según informaron ayer desde la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales. Hasta el pasado miércoles, el número de personas afectadas ascendía a 33, sin embargo, ayer aumentaron hasta casi un centenar tras la actualización de los datos emitidos por parte del Servicio Extremeño de Salud (SES).

El consejero del ramo, José María Vergeles, confirmó ayer que la intoxicación alimentaria se debe a salmonelosis y que los afectados presentan, en su mayoría, un «cuadro leve», a excepción de los nueve ingresados. Una vez confirmado que la salmonela es el germen causante del brote infeccioso, Vergeles afirmó que su determinación significa «cosas buenas», en el sentido de que los pacientes reciben el tratamiento adecuado para su recuperación y para evitar la deshidratación.

Desde la Consejería sostienen que los manipuladores de la materia prima en el restaurante no son los transmisores de la bacteria, sino que el origen del brote está en algún alimento, y se conocerá en unos 10 días tras conocer los resultados de las 30 muestras alimentarias que se han enviado al laboratorio para un análisis exhaustivo. Todas las personas intoxicadas habían ingerido comida del restaurante chino Pekín, muy conocido ya que lleva bastantes años ubicado en los aledaños de la rotonda de la Torre.

La emeritense María Sánchez Pozo es una de las afectadas, junto a su padre y sus dos hermanas. Relata que el pasado domingo al mediodía pidieron a este establecimiento «arroz tres delicias, fideos, rollitos, carne y pollo». Al día siguiente, tanto ella como sus familiares comenzaron a tener vómitos, diarrea y fiebre. Esto les llevó a acudir en varias ocasiones a urgencias al hospital y durante el día de ayer, aún seguían con «mal cuerpo» y tratándose a base de dieta blanda y suero.

La joven que resultó intoxicada sostiene que «muchos» de los que estaban en el hospital por este motivo alegaron que la intoxicación podría proceder del arroz tres delicias, en concreto, del huevo utilizado para elaborar la tortilla. «Hemos estado muy mal los cuatro y menos mal que a mi madre no le ha tocado porque no comió del chino», subraya. De esta forma, María asegura que si tienen la opción de denunciar al restaurante por los perjuicios ocasionados a ella y a sus familiares, no dudarán en hacerlo.

Cabe señalar que pese al revuelo social que ha despertado este caso entre los ciudadanos, muchos de los cuales han expresado su indignación a través de las redes sociales, el local no ha cerrado sus puertas al público.