La junta de personal del ayuntamiento ha criticado el traslado de dos funcionarios del departamento de Recursos Humanos a otros servicios municipales, al considerar que esta decisión se ha adoptado como "represalia" hacia estos dos trabajadores. Ambos demandaron al concejal delegado de este departamento, Juan Espino, al considerar que no se les había abonado las cantidades que les correspondían por la realización de una serie de horas extras.

Estos dos trabajadores también cuentan con el apoyo del partido de la oposición. El concejal del PP, Francisco Miranda, ofreció ayer una rueda de prensa para trasladar a la opinión pública que los dos trabajadores son objeto de una situación de ´mobbing´ desde que denunciaran al concejal.

El ayuntamiento, por su parte, sostiene que las modificaciones producidas en la sección de Recursos Humanos responden a "criterios técnicos de carácter organizativos que se justifican en una mejor distribución de los efectivos", y subraya que la medida se ajusta a derecho, ya que se respetan las retribuciones, los turnos y las funciones atribuidas a los empleados implicados en los cambios.