Periodista

El año ha comenzado con nubarrones. Niebla. Frío. Y un año con un trimestre político hasta el 14 de marzo que sabremos quien nos gobernará los próximos cuatro años. Y la política está como el tiempo. Amanece nublado y comienza a verse el sol a la hora de las copas, con cierta timidez, pero se ve cierta luz. Humedad en el ambiente y preocupación de cuando va a despejar y a quien favorecerá el sol.

Mérida lleva en la lista del PSOE dos posibles senadores, Eugenio Alvarez, que ha demostrado su validez en la política regional como consejero de Agricultura y Medio Ambiente y ahora puede hacerlo a nivel nacional; y Carmen Granados, que ya fue senadora. Cuando su partido la ha puesto en la lista será por su efectividad.

Otros dos emeritenses suenan para estar en los primeros puestos en la lista a las Cortes por el Partido Popular, Pedro Acedo, alcalde de Mérida y el ex presidente del Senado, Juan Ignacio Barrero, que está a disposición del partido y si lo requiere Mariano Rajoy acompañará a Pedro Acedo, cuyas relaciones se han endulzado y ha terminado con sus discrepancias políticas. En una concurrida cena de altos cargos populares en Madrid se estudia esta posibilidad.

Para apoyar la lista de Rodríguez Zapatero, el emeritense y presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que con el alcalde de Mérida, Pedro Acedo, y el también emeritense Manuel Amigo, consejero de Economía y Trabajo, han sido elegidos como los más influyentes de la región según la encuesta de El Mundo.

Mérida ha tenido y tiene buenos políticos. Lo que hace falta es que dejen sus discrepancias para atender necesidades que la ciudad precisa y que por merecimientos propios requiere.

Podemos tener un póker en la cumbre. No es mala jugada y se puede hacer un buen envite.