La Unión de Consumidores de Extremadura (UCE-Extremadura) reiteró sus críticas ante lo que consideran una subida desproporcionada del precio del agua y advirtió que estará entre los diez más elevados de España si sale adelante la propuesta del equipo de Gobierno.

El recibo actual del agua en Mérida se paga cada tres meses, y la tarifa mensual (incluida la cuota fija y un consumo medio de 12,5 metros cúbicos en un hogar de cuatro personas) es de 5,72 euros. Sin embargo, si se aplica la subida prevista, asegura la UCE, la cuota fija pasará a costar 3 euros al mes, algo que, unido al consumo medio por los diferentes tramos supondría una tarifa de 32,25 euros.

La UCE basa sus datos en un informe del 2004 de la Federación de Consumidores en Acción (Facua) y los extrapola a la situación de Mérida teniendo en cuenta los incrementos previstos. Pero, en contra de esta posición, el equipo de Gobierno ha reiterado que, pese a ese aumento, el precio será este año de 7,62 euros de media al mes de las cuotas fijas y variables, por debajo de los más de ocho euros de media en España.

La situación ha provocado un cruce de declaraciones entre ambas partes y desde el consistorio se ha insinuado que la UCE difunde "demagogia", algo que fue criticado ayer con dureza por parte del secretario de UCE-Extremadura, Javier Rubio, que insistió en que esta organización "ha dado datos totalmente rigurosos, con documentos, y con la obligación de denunciar algo que afecta a todos los consumidores, que para eso somos sus representantes legítimos".

EL PERIODICO intentó ayer, sin éxito, recabar la opinión al respecto de Andrés Naranjo, gerente de Aqualia, empresa que gestiona el servicio integral del agua en Mérida.