La Junta de Extremadura dará un plazo al Ayuntamiento de Mérida para que se adhiera al convenio de recogida selectiva de basura de la Administración regional. En caso contrario, no se permitirá la entrada de los camiones de basura al ecoparque para depositarla allí.

Así lo ha afirmado el director general de Medio Ambiente, Leopoldo Torrado, quien señaló que esperarán hasta el 14 de junio, día en el que se constituye la nueva corporación municipal y se nombrará de manera oficial alcalde a Pedro Acedo, para dar un plazo, "tenemos paciencia, pero si vemos que el ayuntamiento ha adquirido 1.000 contenedores con una capacidad de 4.200 litros es que no tienen pensado hacer una recogida selectiva, por lo que van a tener que llevar la basura a Portugal", afirmó.

VERTEDERO

Por este motivo, la Dirección General de Medio Ambiente tiene almacenado en el antiguo vertedero 504 contenedores de 1.000 litros de capacidad esperando que el ayuntamiento firme el convenio y los distribuya por la ciudad. En estos contenedores, de color amarillo, se depositan todo tipo de envases, menos vidrio y cartones, y en los contenedores del ayuntamiento los restos de comida.

Torrado indicó que los emeritenses deben saber que "Mérida no es una ciudad limpia porque no está reciclando, por eso le vamos a dar el plazo, y si siguen, a la planta no entra la basura si no está seleccionada".

Además, por negarse a adherirse al convenio de reciclaje de las basuras, el Ayuntamiento de Mérida pierde 120.000 euros anuales, ya que por cada kilo de basura que se lleva al ecoparque y se selecciona se paga 0,20 céntimos.

Desde la Delegación de Limpieza del ayuntamiento se indicó que firmarían el convenio con al Dirección General de Medio Ambiente cuando la nueva contrata de la limpieza en la ciudad, Fomento de Construcciones, empezara a trabajar, lo que ocurrió en febrero, sin embargo no se ha adherido al convenio.

Además, Torrado explicó que el ayuntamiento está incumpliendo la Ley de Residuos, que obliga a todos los municipios de más de 5.000 habitantes a implantar sistemas de recogida selectiva de residuos sólidos que hagan posible su reciclaje.