El Ayuntamiento de Mérida iniciará hoy unos trabajos de mejora de la accesibilidad en Nueva Ciudad y Bellavista, que se han adjudicado a la empresa Lerpa 2002, S.L. por un importe de 47,765.77 euros. El delegado de Urbanismo, Rafael España, informa de que estas actuaciones tienen un plazo previsto para su ejecución de dos meses y que consistirán en la instalación de pasos de peatones accesibles y rampas de acceso destinadas a las personas con discapacidad.

La idea inicial que tenía el Gobierno local era la de poner en marcha este proyecto a finales del pasado año, no obstante, España explica que no pudieron llevarlo a término por falta de presupuesto. Por ello, y una vez aprobadas las cuentas municipales para este ejercicio, ahora es posible desarrollar estas actuaciones con fondos propios del consistorio. "Responde a nuestro compromiso de actuación en accesibilidad física e inmaterial a través de proyectos y acciones de difusión", puntualiza el edil.

Las obras que se van a proyectar en Nueva Ciudad y Bellavista están encaminadas a "promover la accesibilidad en los barrios". El delegado no precisa cuántos pasos de peatones se van a habilitar, ya que se realizarán en zonas concretas que han sido evaluadas previamente por parte de los técnicos, sin embargo, sí destaca que se van a instalar como mínimo dos rampas accesibles, una de ellas en la sede de la asociación Teléfono de la Esperanza y otra en la la plaza de Gabriel y Galán. Cabe recordar que la asociación había pedido públicamente esta infraestructura al advertir de que las personas con movilidad reducida y en silla de ruedas no podían acceder a sus instalaciones por los problemas en materia de accesibilidad.

"No se cubrirán el 100% de las necesidades, pero están en nuestra agenda y las realizaremos en sucesivas actuaciones", afirma España, quien avanza que los técnicos de la Delegación de Urbanismo ya están evaluando las condiciones de accesibilidad de los edificios municipales. Estas intervenciones se podrían ejecutar al amparo de los 15 millones de euros procedentes de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (DUSI) en caso de que estos fondos europeos se concedan al ayuntamiento. De lo contrario, el edil sostiene que el presupuesto municipal contempla una partida económica a través de la que se podrían desarrollas este tipo de actuaciones.