La política municipal va a cambiar en algunos aspectos.
Mérida entra de lleno en la Ley de Grandes Ciudades y para comenzar, el alcalde Pedro Acedo Penco, que antes era Ilustrísimo, ahora es Excelentísimo.
Mérida sigue siendo la primera en muchos aspectos en esta región y en este caso nuevamente se ha demostrado.
Hemos sido la primera ciudad, por merecimiento propio, y su fachada se ve remodelada de forma continua en determinados momentos a través de la historia.
Como primera medida a tomar ha nombrado Consejero de Presidencia a Miguel Valdés Marín, que tiene buena casta, un padre como Eduardo Valdés, que es todo corazón, y una madre, Isabelita Marín, una madraza, de las que siguen pensando que los hijos no crecen, y siete hermanos para apoyarlo en todo instante.
Este nombramiento hace que Miguel Valdés esté presente en todos los acontecimientos futuros de la ciudad, al ser el representante en todas las instituciones, incluso las protocolarias, y el alcalde delegará en él ciertas funciones cuando lo crea oportuno y su asistencia a los plenos se verá reforzada, ya que sus intervenciones ha sido algunas sonadas.
El alcalde, Pedro Acedo, tenía muy claro este nombramiento y, aunque lo hizo oficial ayer, ya se estaba fraguando su nombramiento hace tiempo. Lo considera como una persona muy preparada y que han luchado juntos en distintos campos de la política.
El nombramiento del segundo consejero lo lleva con todo sigilo, el alcalde no suelta prenda para dar el nombre.
