Arco de Trajano, acueducto de Cornalvo, acueducto de Los Milagros, basílica de Casa Herrera, Castellum Aquae, acueducto de Rabo de Buey, dique romano, hornito de Santa Eulalia, puente romano, templo de Diana, templo de la calle Holguín, termas de San Lázaro o Xenodoquio son algunos de los monumentos que se pueden visitar paseando por la vía pública. Y es que buena parte de conjunto monumental emeritense no requiere de un pago previo para poder disfrutar de su historia y grandiosidad.

Además, la ciudad tiene ejemplos de edificios eclesiásticos cuyas fachadas son dignas de observarse, como es el caso de la concatedral de Santa María, de origen medieval; el convento de Santa Clara, una de las mejores obras del barroco clasicista de la ciudad; el convento de las Concepcionistas, fundado en el año 1588; y el conventual Santiaguista, de mediados del siglo XVI.