La iniciativa original de pintar los pasos de peatones con los colores de la bandera LGBT surgió en el año 2012 en la ciudad estadounidense de West Hollywood (California) con el objetivo de conmemorar el mes del Orgullo Gay. Desde entonces, esta propuesta se ha extendido por otras ciudades del mundo como Toronto, Vancouver, Sidney o Tel Aviv. En España, la ciudad pionera en instalar un paso de peatones multicolor fue Vitoria, que lo hizo en el mes de junio del pasado año, y a la que le siguió varios días después Las Palmas de Gran Canaria.