Asegura que si volviera a nacer repetiría todos y cada uno de los pasos que ha dado en su vida, aunque haya tenido que sacrificar alguna vez no pasar tanto tiempo con su familia como hubiera deseado. Ha recorrido medio mundo, su maleta siempre está preparada y siente especial predilección por la costa oeste de EE UU, donde se compraría una casa sin pensárselo. Así resume su vida Nico Jiménez, una trayectoria ligada a una tradicional práctica con sello extremeño que él ha sabido convertir en un gran negocio que siempre llega a más: el corte a cuchillo del jamón ibérico.

Ya en 2002 Jiménez ganó el campeonato de España de Cortadores de Jamón y cuando, en 2008, entró en el libro Guinness por conseguir la loncha más larga, ya había conquistado numerosos países. Desde entonces su proyección no ha cesado. Tiene escuelas de hostelería en Japón e Italia, ha hecho incontables exhibiciones de su técnica, lidera proyectos de divulgación del ibérico en Houston y ha trabajado en la NASA, entre otros logros de su intensa carrera.

Este profesional, nombrado Maestro Cortador Internacional por la real Academia de Gastronomía, se considera uno de los mejores embajadores tanto de Extremadura como de su “excelente materia prima”.