La crisis también se deja notar en los enlaces matrimoniales. El coste real medio calculado por la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (Fuci) para 100 comensales se sitúa en los 19.000 euros (algo más de los tres millones de las antiguas pesetas), lo que significa un descenso del 11% con respecto a años anteriores. El estudio, realizado consultando precios en una veintena de ciudades españolas, presenta importantes oscilaciones ya que el enlace más barato cuesta 11.000 euros y el más costoso 26.000 euros. En Extremadura, el coste de una boda es de 16.350 euros, uno de los más bajos de la clasificación.

La presidenta de Fuci, Agustina Laguna indica en una nota: "este notable descenso en el presupuesto que los novios destinan a esta celebración es consecuencia directa de su menor poder adquisitivo por la crisis económica. Continúa así la tónica iniciada el año pasado en el que se redujo el coste de la boda un 9%, con lo que el precio medio de un enlace tipo sufre una regresión para situarse en niveles de principios de década".

Una vez más Madrid se coloca en cabeza de las ciudades donde casarse es más caro, con un gasto medio de 22.050 euros. Tras ella le sigue Cataluña y la Comunidad Valenciana, que superan los 21.500 euros en ambos casos. Canarias y Extremadura con 16.300 euros están en los últimos puestos.

La comunidad autónoma pesa bastante a la hora de calcular los gastos, algo que puede suponer diferencias de hasta 6.000 euros. Todo ello ha propiciado que los novios opten por los créditos rápidos en algunas ocasiones. La crisis se perfila como un invitado más que se sienta al banquete.

Agustina Laguna ha afirmado al respecto en un informe de Fuci: "es recomendable que antes de contratar este tipo de productos barajemos otras posibilidades, ya que los tipos de interés pueden llegar a superar el 20% anual. En el caso de que finalmente lo contratemos debemos tener una serie de precauciones que pasan por conocer al detalle las condiciones del mismo y leer con detenimiento la letra pequeña antes de firmar".

Fuci desglosa detenidamente los gastos más habituales a los que los novios tienen que hacer frente. Así, el primero de ellos es el de los trajes, que en el caso de las féminas el precio mínimo es de 700 euros. A ello se suma el precio de zapatos, complementos, maquillaje, peinado y ramo que significan finalmente unos 1.900 euros de media. Los hombres parece que son menos onerosos pueden equiparse entre 460 a 1.120 euros.

Quizá la partida de gasto más importante sea la de el banquete, la mitad de la factura total. Según restaurante y menú el cubierto puede oscilar entre los 50 y los 110 euros. La música (en directo o con pinchadiscos) y la barra libre (ya casi indispensable) es de 1.500 euros de media.

Pero la retahila de gastos no acaba aquí. Imprescindibles son los detalles nupciales: arras, alianzas, invitaciones, flores de la iglesia, reportaje fotográfico y de vídeo (con un precio que oscila entre los 600 y los 1.300 euros).

Para poder superar el estrés de la boda el viaje de novios ofrece precios dispares, según el destino elegido, aunque lo mínimo por pareja son los 1.800 euros.

La Federación de Usuarios y Consumidores Independientes indica que las bodas no suelen generar problemas aunque destaca los más habituales. En el restaurante pueden presentarse diferentes calidades a las ofertadas, aparición de conceptos no pactados. En el viaje de novios se pueden cancelar vuelos o darnos hoteles de menos categoría a la acordada. Los vestidos y trajes pueden no estar listos en el tiempo convenido o presentar defectos que sean un obstáculo. Finalmente, el fotógrafo suele ser fuente de conflicto con la inclusión de fotos de poca calidad o precios abusivos por copias sueltas.

A VUELTAS CON LAS FOTOS Uno de los problemas más habituales es que la iglesia o el restaurante impidan la entrada de un fotógrafo elegido por los contrayentes: "los novios deben informar por escrito a la iglesia o restaurante que han contratado a un profesional y recordando que actúan según la legalidad ejerciendo su derecho a la libre elección. Las cláusulas de contratación de servicios de imagen que fijan estos lugares son abusivas por prestar un servicio accesorio que no se ha solicitado y por no respetar la Ley General de defensa de los consumidores", indica la federación de consumidores.

Finalmente hace una serie de recomendaciones. La primera de ellas es hacer un presupuesto en función de las posibilidades económicas de la pareja. Comparar con antelación los precios y las calidades de lo que se contrata.

Es importante dejar cerrado el precio final del cubierto, con decoración y prueba del menú incluida. La barra libre da muchos quebraderos de cabeza: dejar claro marcas que se sirven, horario y forma de pago.

Una lista de boda evita que se repitan regalos. En algunas comunidades se estila la entrega de dinero en metálico.

El viaje debe reservarse con la debida antelación. Para ahorrar costes se puede alquilar la vestimenta y pedir prestado el coche de novios. La estancia en el hotel donde se celebra la boda debería negociarse para ser gratuita. Los adornos florales pueden compartirse con otras parejas que se casen ese mismo día.