Manuela Holgado (Sierra de Fuentes, 1952) ha hecho del flamenco una de sus principales banderas, como demuestra la reciente puesta en marcha de un Centro Extremeño del Flamenco. Esta doctora en Ciencias de la Educación ha jugado un importante papel en la redacción de la candidatura que se presentó en la Unesco, junto con las comunidades autónomas de Andalucía y Murcia. Su capacidad de coordinación y trabajo en equipo ha quedado patente en numerosas ocasiones, defendiendo los proyectos culturales de las distintas comunidades autónomas ante Bruselas. La declaración de la Unesco refrenda el trabajo realizado.

--¿Cuál ha sido exactamente la aportación de Extremadura a la candidatura del flamenco como Patrimonio de la Humanidad?

--Extremadura ha tenido un papel protagonista, y a la vez compartido, en esta candidatura. Ese es uno de los elementos que ha enriquecido más aún este proyecto. Y es que nuestra región, junto a Andalucía y Murcia, ha promovido de manera conjunta esta declaración. Las tres Comunidades han trabajado al unísono durante meses para elaborar el expediente que se remitió a la Unesco. Además desde Extremadura se enviaron avales y apoyos de prácticamente la totalidad de artistas, estudiosos y federaciones, ya que era uno de los requisitos previstos en el expediente.

--¿Qué rasgos definen al flamenco extremeño como una manifestación singular dentro del gran abanico del flamenco?

--Extremadura tiene un lugar en la geografía del flamenco por varias razones fundamentales. Aquí han nacido grandes intérpretes de este género, por lo que enumerar a todos sería interminable. Nuestra región también es cuna de creadores de estilos flamencos y además, el flamenco extremeño aporta dos palos autóctonos: me refiero a los jaleos y los tangos. En Extremadura el flamenco tiene una cadencia especial y característica; un deje propio, relacionado con nuestra manera de hablar que lo hace único, diferente, y que viene a enriquecer la universalidad del flamenco.

--¿Cuántas asociaciones y peñas flamencas existen en Extremadura?

--El flamenco en nuestra región disfruta de un apoyo social muy importante. En la actualidad tenemos cerca de 60 peñas, la mayoría en la provincia de Badajoz. Estas peñas están agrupadas en tres federaciones que tienen una destacada actividad durante todo el año. Por otra parte, creo que es importante destacar la existencia de dos asociaciones de artistas flamencos. Y es que en el sostenimiento del flamenco las Administración tenemos cierta responsabilidad, pero el papel fundamental corresponde a los artistas y a la afición.

--¿Cuántos festivales y manifestaciones culturales específicas se celebran al año en la región relacionadas con el flamenco? ¿Qué posición ocupa Badasom dentro de ellos?

--El flamenco es una expresión cultural viva, por eso son innumerables las actuaciones que se registran cada año. Desde la Junta de Extremadura colaboramos con todos los eventos flamencos que se celebran en la región y promovemos el Badasom. Este festival se ha convertido en un nuevo referente, ya que es un ejemplo de eliminación de fronteras y aproximación de pueblos y culturas a través de dos estéticas musicales comunes en esencia: el fado y el flamenco.

--¿Qué valores representa esta manifestación cultural que le han hecho merecedores de este reconocimiento?

--La propia Unesco lo explica en la declaración. El flamenco expresa toda una gama de sentimientos y estados de ánimo con palabras sinceras y expresivas. Es un signo de identidad de numerosos grupos y comunidades, como Extremadura, además, se ha transmitido en el seno de dinastías de artistas y peñas de flamenco que han desempeñado un papel determinante en la preservación y difusión de este arte.

--¿Cómo trabaja la Consejería de Cultura para promover y proteger el flamenco extremeño?

--Se lo explicaba hace un momento. En esencia, la Consejería de Cultura y Turismo tiene presencia y participa en todos los eventos flamencos de la región, pero la protección tiene un sentido más amplio. Ahora celebramos que la Unesco lo haya declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad gracias, entre otras cosas, al empeño de la Junta de Extremadura por trabajar con Andalucía y Murcia para defender su universalidad. Nos sentimos muy orgullosos de esta declaración porque supone el reconocimiento mundial de este arte.

En el ámbito de Extremadura también seguimos trabajando, por eso se ha iniciado el expediente para que el flamenco sea declarado Bien de Interés Cultural en nuestra región para conseguir así el máximo nivel de protección. Además, hemos puesto en marcha el Centro Extremeño de Flamenco, en plena Plaza Alta de Badajoz. Desde este lugar emblemático para el flamenco extremeño vamos a promocionarlo y a fomentar su investigación y difusión.

--¿Harán alguna acción especial con el flamenco ahora que está reconocido por la Unesco como patrimonio inmaterial de la Humanidad?

--Seguiremos trabajando en su defensa y promoción, pero en primer lugar vamos a festejar esta declaración, que supone un hito en la historia del flamenco. Lo haremos la próxima semana, con un espectáculo que reúne a integrantes de algunas de las dinastías flamencas más importantes de Extremadura, algunos de los cuales participaron en septiembre en la Bienal de Flamenco de Sevilla. Podrá verse el 30 de noviembre en el Teatro López de Ayala, de Badajoz y el 2 de diciembre llegará al Gran Teatro de Cáceres. Será una auténtica fiesta para los sentidos.