Esta comarca del Norte de Extremadura es una zona de naturaleza prácticamente intacta, una de esas zonas en las cuales el estilo de vida conserva tradiciones, costumbres y estampas de siempre.

Los intrincados valles y montañas de esta comarca, en el límite con la salmantina Sierra de Francia y el hermoso Valle de Las Batuecas, junto a sus pueblecitos de piedra y pizarra conforman, sin lugar a dudas, el rincón más bello de toda Extremadura, uno de los lugares más pintorescos y mejor conservados de la geografía española.

Su arquitectura popular, su entorno natural, su gastronomía, sus saltos de agua, sus meandros, su artesanía, su folclore, su historia, sus grabados rupestres, sus gentes... hacen de esta bella comarca un lugar privilegiado para disfrutar de la naturaleza, su cultura y su tranquilidad.

ARQUITECTURA POPULAR La arquitectura popular hurdana, basada en construcciones en piedra y pizarra, constituye uno de los principales baluartes y señas de identidad de la comarca.

Sus pueblos parecen esconderse en las faldas de las montañas, al pasear por sus calles destacan bellos rincones que aún conservan gran parte de su arquitectura tradicional, caracterizada por paredes en piedra, tejados de pizarra y puertas en madera.

Podemos encontrar bellos rincones de arquitectura tradicional en Riomalo de Arriba, El Gasco, Ovejuela, Avellanar, Aceitunilla, Fragosa, Casares de Las Hurdes, Aldehuela... así como hermosos conjuntos de arquitectura popular en algunos de sus despoblados como El Moral, Arrocerezo, La Horcajada, etc.

A lo largo y ancho de la comarca existen numerosas construcciones que forman parte de la arquitectura popular, como son sus paredones o terrazas, sus puentes, sus eras de trilla, corrales para colmenas... que dejan una clara constancia del trabajo de los hurdanos por adaptarse a la dureza del medio en el que se desenvuelven.

En la actualidad, en la localidad de El Gasco existe un pequeño Centro de Interpretación de la Vivienda Tradicional Hurdana, en el cual se puede observar su estructura exterior e interior, además de contemplar su mobiliario tradicional y sus dependencias.

ENTORNO NATURAL La situación de la comarca en las estribaciones del sistema central, los cinco ríos que conforman los valles de Las Hurdes, la proximidad del Parque Natural Valle de Las Batuecas, la riqueza y diversidad de especies animales y vegetales hacen de la zona un lugar con un entorno privilegiado. Reconocido a nivel internacional al tener catalogadas dos terceras partes de la comarca como zonas de interés natural, bien como lugares de interés comunitario, zonas de especial protección de aves o Red Natura. La comarca cuenta además con un lugar de interés científico. Nos referimos al paraje denominado Volcán de El Gasco, lugar en el cual ha sido encontrado un mineral único que deja constancia de que en la zona se estrelló un meteorito hace millones de años.

Algunos de los principales referentes de la naturaleza hurdana:

La red de senderos: más de 30 rutas para realizar a pié, en coche o en bicicleta.

Piscinas naturales: a lo largo de los 5 ríos hurdanos existen numerosas pozas naturales para el baño (Las Mestas, Sauceda, Ovejuela, Pinofranqueado, El Castillo, Las Erías, Caminomorisco, Horcajo, Avellanar, Casar de Palomero, Rivera Oveja, Fragosa, El Cerezal, Arrolobos, Riomalo de Abajo, Nuñomoral, -)

Red de miradores: espectaculares vistas de los lugares más increíbles de la geografía hurdana (Pinofranqueado, Caminomorisco, Avellanar, Ladrillar, Cabezo, Cambroncino, El Gasco, Martilandrán, Riomalo de Abajo, Casar de Palomero, El Cerezal, Las Mestas, Riomalo de Arriba, Casares de Las Hurdes...).

Los saltos de agua, también denominados chorros o cascadas (los canalizones en La Horcajada, La Chorrera de Arrobatuequilla, Cascada del Ceño en la Huetre, la Garganta de Horcajo, el Chorro de la Miacera en el Gasco, el Chorro de los Corralones en Las Erías, el Chorritero en Ovejuela, la Chorrera de la Buitrera en Ovejuela o Chorro de Los Angeles, la Garganta de Arrocambrón, el Chorro del Gollete en Cerezal).

Observación de fauna (especies protegidas como Lince Ibérico, Buitre Negro, Cigüeña Negra, Cabra Montés, y otras comunes como: jabalí, ciervo, corzo, perdiz, trucha, etcétera).

Observación de flora (la comarca cuenta con tres especies declaradas árboles singulares de Extremadura: la Madroñera de Guijarro Blanco en El Castillo, el Valle de Los Tejos en Cerezal y El Enebro Centenario de Las Mestas, además de una exuberante flora autóctona con ejemplares como: tejos, acebos, madroñeras, jaras, carquesas, labiérnago, cornicabra, etcétera).