Javier Carbonell es el Empresario Extremeño del Año 2010. Creó Ogesa, la empresa de la que es presidente ejecutivo y director gerente, en 1989. En estos más de veinte años el crecimiento de esta compañía ha marchado paralelo al de la región. Fundada como consultora, comenzó su actividad en el ámbito agroalimentario, para pasar después al sector industrial, la arquitectura, la I+D+i, las energías renovables o las nuevas tecnologías. "Hemos ido evolucionando hacia lo mismo que Extremadura es ahora, un gran foco del conocimiento", dice este empresario. A día de hoy Ogesa desarrolla proyectos en países de tres continentes y cuenta con una plantilla de más de medio centenar de personas (en torno a 120 si se suman las 17 empresas participadas).

Carbonell nació en Córdoba hace 48 años y vino a vivir a Badajoz con 14. Se siente "extremeño de verdad, de los que conocen Extremadura profundamente, de arriba a abajo, porque la he recorrido cientos de veces". Su bisabuelo fue fundador de la industria aceitera Carbonell, y tanto él como su abuelo y su padre fueron ingenieros de minas. "Yo fui la oveja negra y estudié ingeniería agrónoma", bromea. Está casado, --"con una mujer maravillosa, oftalmóloga, que está implicada desde hace varios años en nuestro proyecto", cuenta-- y tiene dos hijos.

TRABAJADORES Carbonell presume también de plantilla: "Actualmente lo que funcionan son los equipos multidisciplinares. En esta empresa se hablan nueve idiomas y hay 22 titulaciones diferentes", recalca. En este sentido, añade que para una empresa resulta fundamental contar con "trabajadores bien formados, creativos y con imaginación, porque lo que necesitan las empresas hoy día es diferenciarse". Una filosofía que queda condensada en el eslogan de Ogesa: "Donde nacen las ideas".

"Las nuevas tecnologías son todo de la mano de las personas", incide Carbonell, para quien los trabajadores son el capital más importante de una empresa. "En Ogesa tenemos un departamento de gestión de personas. Es un aspecto que valoramos mucho. Aquí trabajamos divirtiéndonos, de lo contrario perderíamos la chispa y la creatividad y el trabajo se convertiría en una monotonía", apunta.

Ogesa ha apostado por sectores de futuro como el del agua (depuración y sostenibilidad), las energías renovables o la I+D+i, y también por su internacionalización. En relación a este último aspecto, actualmente desarrolla proyectos en Angola, Israel y Turquía y tiene puestas sus miras en Suramérica. Eso sí, siempre sin prisas: "Nosotros hemos apostado por proyectos a largo plazo. Son iniciativas que proporcionan una alta rentabilidad, aunque necesiten de mayor tiempo y esfuerzo".

Para este emprendedor el premio otorgado por EL PERIODICO EXTREMADURA supone "un revulsivo. Estos puntos de inflexión en los que te reconocen la trayectoria y el saber hacer suponen una especial satisfacción y te hacen seguir adelante con más ganas".

"Hoy en día las empresas necesitan más que nunca del apoyo de los medios de comunicación", prosigue Carbonell, que también hace hincapié en el papel de la Administración pública --"debe acompañar a la empresa, y me consta que lo hace, pero todo lo que se haga siempre será poco"-- y en el de las entidades financieras que, subraya, "tienen que cambiar el modelo. Deben valorar las empresas, no los patrimonios. Se trata de valorar los proyectos empresariales y apostar por los empresarios".