El 2016 ha sido un año muy especial para la Denominación de Origen Pimentón de la Vera. El sello de calidad ha cumplido sus bodas de plata amparando la excelencia de este condimento, considerado el ‘oro rojo’ de la comarca donde se elabora. La actual es la cosecha que conmemora estos 25 años de trabajo en pro de la excelencia del Pimentón de la Vera para que la disfrute y reconozca el consumidor.

El trabajo de certificación que realiza el consejo regulador de Pimentón de la Vera, según explica su secretario Bonifacio Sánchez, mantiene un producto altamente demandado por los consumidores y además garantiza la experiencia en su elaboración.

Actualmente están amparadas por el Consejo Regulador de Pimentón de la Vera 1.285 hectáreas, que producen en torno a los 3,8 millones de kilos de pimiento seco. La denominación de origen quiere seguir mejorando el producto y por eso ha presentado la solicitud para constituir un grupo operativo con cargo a la línea de ayudas de la Junta de Extremadura. Este grupo operativo trabajará para mejorar el secado del pimiento. Estará conformado por agricultores, empresarios, industrias, y centros de investigación tecnológica. Las previsiones apuntan a que estará ya en marcha a principios del 2017. Actualmente, como curiosidad, el consejo regulador cuenta con un panel de cata formado por expertos, que hace posible la certificación por Enac.

El camino de la DOP Pimentón de la Vera ha sido muy largo y ha luchado con no pocas dificultades. Era un producto que hace un cuarto de siglo estaba en declive. Prueba de ello es que se mezclaban los pimientos de Marruecos y de otros países para hacer pimentón. Pero su historia es la narración de un éxito conseguido gracias al esfuerzo de técnicos, industriales y agricultores.

El resultado actual es que el 18% del Pimentón de la Vera se exporta ahora a otros países y conquista paladares por su sabor ahumado y exclusivo. Ahora es una de las marcas más conocidas de Extremadura y uno de sus ‘buques insignia’ en el ámbito gastronómico.

El cultivo del Pimentón de la Vera fue introducido en el siglo XVI por los monjes Jerónimos del monasterio de Yuste. Ahora, el 68% del pimentón producido en la comarca está certificado por el Consejo Regulador de la DOP Pimentón de la Vera. En La Vera, zona de origen del auténtico Pimentón de la Vera, el pimiento para pimentón goza de un microclima privilegiado -las cumbres de Gredos junto a los cursos de las gargantas y las ricas vegas bañadas por el río Tiétar- para su desarrollo natural. Los pimientos cultivados son de la especie Capsicum annum y las subespecies cerasiforme y longum, que dan lugar a tres tipos de pimentón: dulce, agridulce y picante.

El aroma y sabor característico se obtiene gracias al tradicional sistema de secado al humo. La estabilidad de color es consecuencia del alto grado de fijación de carotenos que se produce en el pimiento a lo largo de su cultivo en el microclima de La Vera y en el proceso de secado.