LA Red de Hospederías se ha convertido --tras los renovados impulsos que ha experimentado en el último año-- en todo un referente del turismo interior de calidad. Son pequeños hoteles de lujo emplazados en edificios históricos singulares y ubicados en lugares de exuberante naturaleza y riqueza patrimonial. Actualmente, la región cuenta con ocho hospederías, seis abiertas: Mirador de Llerena, Parque de Monfragüe, Conventual de Alcántara, Valle de Ambroz, Puente de Alconétar y Hurdes Reales) y dos (Mirador de Orellana y Jerte) que se encuentran cerradas con el fin de acometer obras de ampliación y mejoras. Hay otras dos en construcción (Alburquerque y San Martín de Trevejo), y otras cinco previstas, en Olivenza, Castuera, Herrera del Duque, Villafranca de los Barros y Fregenal de la Sierra.

Las de Castuera y Villafranca iniciarán sus obras de construcción en 2010. Este año se continuará con la construcción de Alburquerque y Olivenza; se finalizará la de San Martín de Trevejo y se ampliará la de Hervás.

La Red de Hospederías, gestionada por la Junta de Extremadura, incrementó en un 22% el número de pernoctaciones de enero a agosto de 2009, lo que ha supuesto un total de 13.114 usuarios frente a las 10.721 de 2008, habiendo superado el 50% de ocupación en ese mismo periodo.

Este comportamiento se debe a que las mismas se encuentran enclavadas en zonas rurales de "importante atractivo turístico" y a que actualmente son gestionadas desde la empresa pública.

Para entender el papel que juegan estos establecimientos dentro del sector turístico deben tenerse en cuenta tanto los objetivos que pretenden alcanzar, así como la finalidad para la que han sido creados.

Las zonas rurales han ganado en atractivo y ofrecen un "gran" interés cultural y medioambiental, por lo que el turismo rural se ha convertido en una "importante" fuente de diversificación de la economía, complementaria de las actividades agropecuarias.

Las Hospederías de Extremadura pretenden contribuir al desarrollo turístico de las zonas rurales, de ahí que se ubiquen en poblaciones de menos de 15.000 habitantes, que contando con un "gran potencial" turístico no han sido objeto, o lo han sido en menor medida, de la iniciativa privada.

Con las mismas se pretende propiciar la cohesión social, económica y territorial como principios básicos del desarrollo sostenible. Se persigue, por tanto, "el reequilibrio socio territorial, articulando adecuadamente los recursos y ofertas del territorio y actuando desde el sector público en las zonas turísticamente más deficitarias", añade la Junta de Extremadura.

En este sentido, el Gobierno regional subraya que invierte recursos en este ámbito con el único fin de potenciar la región como un destino turístico de "primer orden" y contribuir, a través del mismo, al desarrollo económico y social.

En un elevado número de casos, la construcción de las hospederías permite recuperar o poner en valor edificios singulares, contribuyendo de manera "significativa" a la conservación del patrimonio, que "de otra forma sería difícil mantener".

Así, en los casos en los que las hospederías tengan que ser de nueva planta, se saca a concurso la idea del proyecto con el fin de que los edificios resultantes sean "arquitectónicamente innovadores y también singulares".

Otro de los objetivos de la red es que la empresa privada secunde la acción, creando más infraestructuras y servicios en el entorno, ya sean estos de alojamientos, restauración, turismo activo...

TURISMO DE CALIDAD

La Red de Hospederías ofrece, como punto fuerte hacia el cliente, la ubicación y el entorno. La combinación del legado patrimonial extremeño y su relación con el medio natural son dos de los principales activos de esta red.

Al mismo tiempo, el entorno, la naturaleza, la peculiaridad de las poblaciones y las comarcas, unidos a la cantidad de oferta complementaria en todos los ámbitos, suponen un "importante atractivo" para el turista que elige la región.

Además, en estos momentos, las Hospederías de Extremadura están inmersas en el proceso Pasa a la página siguiente