Una falta a la barrera lanzada por Leo Messi en el minuto 95 puso punto final al frustrante estreno de Argentina en el Mundial. Ese lanzamiento resumió un partido en el que Islandia volvió a demostrar la unión y entusiasmo que la llevó a los cuartos de final de la pasada Eurocopa eliminando a Inglaterra. Sin hacer nada del otro mundo, los vikingos contuvieron a un rival frágil en defensa y espeso en ataque. Ni siquiera el mejor del mundo pudo brillar. Al contrario, falló un penalti más y coleccionó remates sin éxito. Croacia y Nigeria serán los próximos rivales para evitar el desastre.

No dejó buenas sensaciones Argentina en su estreno. Hace cuatro años se plantó en la final del Mundial de Brasil con muchas dudas, flirteando con el abismo pero salvándose siempre a base de compromiso y el talento de Messi. Con Sampaoli en el banquillo no ha mejorado la imagen. Solo hay que ver ese doble pivote con Mascherano y Biglia, indigno de una selección que sueña con añadir otra estrella a su camiseta.

Le toca pasar horas complicadas a la estrella azulgrana, que tropezó de nuevo con una piedra demasiado habitual en su carrera. Mientras Griezmann marcó de penalti para Francia y Cristiano selló un doblete a balón parado añadiendo una falta directa a la pena máxima provocada por él mismo, Messi fue incapaz de batir a Halldorsson. Disparó demasiado flojo, pero no se arrugó. Lo intentó desde todas partes y de todos modos. No hubo manera.

MARADONA, EN LAS GRADAS / Con Maradona en el estadio Spartak agachando la cabeza y mostrando su disconformidad con el juego argentino, la albiceleste tuvo contra las cuerdas en muchos momentos a Islandia, pero sin la clarividencia necesaria para ser un equipo a tener en cuenta para el título. Argentina es un bloque desequilibrado, con estrellas en el ataque, un centro del campo pobre y muchas dudas atrás, empezando por la portería. Si David de Gea ha abierto el debate en España con sus errores contra Portugal, Caballero tampoco tuvo un debut plácido. Se le vio nervioso y estuvo blando en el tanto islandés. Si a Maradona le da por hablar habrá palos para muchos, empezando por Sampaoli.

Islandia exhibió su clásico libreto. Ordenada atrás y tremendamente solidaria, se centró en limitar los espacios, olvidándose del balón. De poco le sirvió a Argentina el 78% de posesión, los 27 remates o sus 674 pases, frente al 22%, 8 disparos y 132 combinaciones de su adversario. Los vikingos fueron directos y ya pudieron marcar en una doble ocasión de Finnbogason y Bjarnason a los nueve minutos. Messi hizo su primera aparición con un gran disparo que dio paso al golazo del Kun Agüero.

Un mal despeje de Caballero propició el empate de Finbogasson. Eso dejó atolondrados a los argentinos, que solo despertaron para reclamar un penalti en unas manos involuntarias (m. 41). En un partido tan cerrado Argentina se encontró con un penalti sobre Meza que debía servir para decantar el choque. Messi agarró el balón con ilusión pero el arquero adivinó su disparo a la perfección(m. 62).

MURALLA INTACTA / No contaba con ese error la hinchada argentina, que se volcó al momento animando a su ídolo sin parar. Falló Messi el penalti y comenzó una cruzada particular para subsanar su error. De falta, con la derecha, con la izquierda, de lejos, de cerca... Nada. La muralla islandesa se mantuvo intacta. Sampaoli intentó agitar las cosas con Banega, Higuaín y Pavón. Solo el último aportó. A punto estuvo de provocar otro penalti. El árbitro polaco no pitó esta vez y Messi acabó desesperado, lamentándose en el centro del campo.

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3Goles: 1-0, m.19: Agüero; 1-1, m.23: Finnbogason.

3Árbitro: Szymon Marciniak (POL). Sin amonestados.

3Estadio: Spartak de Moscú.

3Espectadores: 44.190.

3Argentina: Caballero; Salvio, Otamendi, Rojo, Tagliafico; Mascherano, Biglia (Banega, m.54); Maxi Rodríguez (Higuaín, m.84), Leo Messi, Di María (Pavón, m.76); y Sergio ‘Kun’ Agüero.

3Islandia: Halldórsson; Saevarsson, Arnason, Sigurdsson, Magnússon; Gunnarsson (Ari Skulason, m.76), Gylfi Sigurdsson, Gudmundsson (Rurik Gislason, m.63), Birkir Bjarnason, Emil Hallfredsson; y Alfred Finnbogason.