Sergio Ramos, capitán de la selección española, apuntó en un balance de cierre de temporada en su parte dedicada a la selección española, a «la inestabilidad» que a su juicio generó en el vestuario la decisión de Luis Rubiales, presidente de la Federación, de prescindir de Julen Lopetegui. «Era un reto inmenso, apasionante que afrontábamos con toda la energía del mundo. Y cuando aún no habíamos debutado, sucedió algo que no esperábamos. No voy a valorar los actos ni las decisiones, pero la inestabilidad nunca es buena compañera», aseguró. «Aún así mantuvimos la cohesión, la fuerza del grupo, la energía de un conjunto de compañeros y amigos, pero lo cierto es que hemos ido de más a menos. Y aunque muchos penséis que podríamos haber hecho más, no supimos hacer más. Porque nos dejamos sobre el verde hasta la última gota de sudor, el último ápice de energía y bravura. No lo habremos hecho como debíamos, pero sin duda lo intentamos hasta el final».