La reforma de cada instalación oscilará entre los 4.800 y los 8.600 euros, dependiendo de la mejora. El coste más importante corresponde a la sustitución de intercambiadores de gas por otros de gasóleo o combustible sólido de biomasa: desde los 3.700 euros que cuesta la instalación de un quemador y una cámara de combustión, hasta los 7.500 euros que supone sustituir el intercambiador actual por uno de biomasa. La opción intermedia (6.000 euros) supondría la instalación de una caldera de gasóleo para varios secaderos mediante radiadores por agua caliente.

Pero aparte es necesario realizar obras de mejora en la estructura de los secaderos. Philip Morris quiere que los cultivadores eliminen el poliuretano expandido que, a modo de aislante, se encuentran aún en las paredes de numerosos secaderos. Un secadero puede alcanzar hasta 75ºC durante el secado. Para eliminar el poliuretano es necesario adaptar las paredes con el revestimiento de unas placas y el coste de la inversión asciende, aproximadamente, a 1.100 euros. Todos coincide en que son inversiones muy costosas para un sector que no tiene claro su futuro.