Los operarios del Ayuntamiento de Navalmoral trabajan desde hace unos días en la eliminación de pequeñas zonas de césped de la avenida de Las Angustias, donde en su lugar se están colocando adoquines, una actuación que ya se acometió en la avenida del Magisterio. Se ejecuta así la decisión del equipo de Gobierno local de eliminar pequeñas zonas verdes del casco urbano "por residuales o que por su tamaño suponen un esfuerzo grande en mantenimiento", explicó ayer el portavoz municipal, José D. Pascual.

La idea, señaló el concejal, es "concentrar los espacios de césped a zonas más amplias y que sean más fáciles de mantener por los jardineros". En este sentido, Pascual recordó que Navalmoral únicamente cuenta con tres jardineros en plantilla aunque, ocasionalmente, el número se amplía con distintos programas de empleo.

Además de adoquines (una solución barata ya que el ayuntamiento cuenta con un amplio stock sacado de la anterior calle principal), en algunas zonas más pequeñas de otros puntos del casco urbano se ha utilizado hormigón. Lo que sí se mantendrán serán los árboles y los arbustos.

De momento, la solución de los adoquines no ha gustado a los vecinos de la avenida de Las Angustias, porque en pocos metros se pueden ver tres tipos de acerado distinto. "Eso pasa en otras zonas de Navalmoral, pero no podemos hacer una inversión tan grande para unificarlo todo", reconoció Pascual.

Más allá de una solución para zonas pequeñas, también se busca otro remedio para las zonas de césped demasiado amplias. Y es que, por ejemplo, en las unidades de actuación 14 y 15 ha habido diversos problemas con el césped y también dificultades de riego. "La idea que se baraja es eliminar zonas muy amplias, y dejar el césped reducido a zonas intermedias por los costes de mantenimiento y el consumo de agua", señaló Pascual, quien añadió que "una opción sería sustituir el césped por vegetación espontánea y arbolado".