La elaboración y ejecución de un plan integral de limpieza en el que participen no sólo los grupos políticos sino también todas las asociaciones de vecinos es la propuesta que ayer lanzó al equipo de gobierno la portavoz del grupo municipal socialista, Joaquina López, quien explicó que la intención es acabar con la "imagen de suciedad que ofrece el municipio".

Según manifestó, las medidas que se proponen desde la concejalía de Medio Ambiente, tales como limpiar la vía pública con más agua, cambiar el horario de recogida de basura para los industriales o imponer fuertes sanciones a aquellos que no depositen los residuos en los contenedores en el horario establecido, no son más que "un mero parcheo que no resuelve el problema". Estas actuaciones han surgido después de comprobarse que cada vez son más los desperdicios y cartones que se amontanan en determinadas zonas.

Así, López resaltó que Navalmoral necesitaba un plan que permita que la localidad "mantenga un aspecto de limpieza todo el día, que los fines de semana no queden dispersos los restos de los pequeños botellones que se llevan a cabo por toda la ciudad, que se retiren de una vez los rastrojos del casco urbano y, sobre todo, que se eliminen las innumerables pintadas que ensucian toda la población".

LAS PINTADAS Precisamente, la preocupación del consistorio por la multitud de pintadas que inundan los inmuebles ya fue denunciada hace unas semanas por el alcalde, quien solicitó la colaboración ciudadana para atajar este daño contra el patrimonio, y que supone un alto coste para las arcas municipales.

Sobre este aspecto, López dijo que era necesario que el alcalde "predique con el ejemplo" y elimine las pintadas que aparecen en los edificios públicos, monumentos y mobiliario urbano, ya que "son responsabilidad del ayuntamiento". Del mismo modo, subrayó que era necesario la publicación de un bando prohibiéndolas y estableciendo duras sanciones económicas para el que lo incumpla, así como la reparación del daño ocasionado.