En el rigor del verano, el calor y las ganas de salir de un lado a otro hacen que muchas personas busquen nuevas actividades, tiempos de ocio para conocer gente interesante y vivir experiencias diferentes, dejando a un lado la rutina diaria que impone el sopor en pleno agosto. Entre estas alternativas destaca la elegida por un grupo de 25 personas de diferentes países que han decidido participar en el III Campo de Trabajo Internacional, desarrollado en el albergue El Quinto Pino del municipio de Talayuela.

Los alumnos, de edades comprendidas entre los 18 y los 30 años, están acompañados por cinco monitores durante los veinte días de duración de esta actividad, que tiene como objetivo prioritario, según explica Inés Pérez, una de las trabajadoras del programa, la convivencia y la formación de cada uno de los participantes.

Aprendices de payasos

La idea central que este grupo de monitores han querido plasmar en el campo de trabajo es El circo en la naturaleza , una iniciativa subvencionada por la Junta de Extremadura que pretende adentrar a los alumnos en el mundo de los payasos, equilibristas y malabaristas aprovechando siempre el entorno natural que les rodea. Para lograr este objetivo se han programado un gran número de actividades que van desde talleres de acrobacias o malabares hasta técnicas aéreas. También se realizan salidas por los pueblos de La Vera para que los participantes puedan conocer la zona y disfrutar de sus parajes.

Fomento de la lectura

Además, los participantes trabajan en la creación de una biblioteca permanente en el albergue que permita a los aficionados a la lectura disfrutar de los libros que más les gustan. Lo curioso es el lugar elegido para ubicar este servicio: una furgoneta abandonada que están reformando interiormente para amoldarla a las estructuras que albergarán los libros. En la parte exterior que rodea el vehículo se pretende crear una sala de lectura donde todas las personas que pasen unos días en el Quinto Pino aprendan de los libros en plena naturaleza.