El 13 de diciembre, festividad de Santa Lucía, la ONCE ha cumplido 70 años y la Fundación ONCE celebró su 20 aniversario. El modelo de la ONCE y su Fundación, asentado en la sociedad española y apreciado con admiración fuera de nuestras fronteras, ha logrado en estas siete décadas que las personas ciegas o con otro tipo de discapacidad salgan de la indigencia o del subsidio y se incorporen a un sistema basado en su capacidad para poder integrarse, especialmente a través de un empleo digno. Es una apuesta por la que las personas con discapacidad decidimos no ser una carga sino aportar a la sociedad, generar riqueza y mostrar que somos unos ciudadanos más.

La ONCE nació en 1938 por el empeño de unos pocos visionarios , si se permite la expresión, que comprendieron que sólo con el trabajo, el esfuerzo y el espíritu de superación de las personas ciegas surgiría algo verdaderamente importante y de futuro. Esa pelea por demostrar las capacidades de los ciegos --y por extensión del resto de personas con discapacidad-- fue ya protagonista en los inicios de la ONCE y nos ha perseguido y persigue siempre.

XYA ENTONCESx, en la España de 1938 que todos pueden imaginar, frente a este grupo de ciegos adelantados a su época, otras voces preferían optar por la política de las subvenciones y la beneficencia. En concreto, llegó a existir un proyecto normativo que pretendía prohibir las rifas que eran ya sustento de algunos ciegos y, a cambio, entregar 6 pesetas diarias, de las de entonces, a cada ciego necesitado. No sé si llegan a imaginarse lo que supondrían esas 6 pesetas actualizadas a día de hoy y multiplicadas por los 70.000 ciegos que hay en España que, sin trabajo, obviamente, estaríamos necesitados. A buen seguro, en épocas de crisis, como la que atravesamos, las arcas públicas se resentirían mucho.

Pero muy al contrario, y por suerte para todos nosotros, triunfó el modelo con el que los ciegos españoles empezaron a vender el cupón prociegos (hoy Cupón de la ONCE) y lograron iniciar un sueño que ni siquiera pudieron imaginar, todo ello basado en el esfuerzo y el trabajo.

Ese modelo, que hoy es imagen y bandera de España allí donde vamos, ha logrado situar al sector de la discapacidad en una posición muy avanzada en todo el mundo, incluso en los envidiados países nórdicos que, con modelos más asistenciales, tratan ahora de copiar nuestro sistema, sabedores de que es más positivo e integrador para las personas con discapacidad y para toda la sociedad.

Desde siempre, desde aquella ONCE embrionaria de los años 40 y 50, la educación y el empleo se consideraron las claves para que los ciegos logren su normalización en la sociedad. De hecho, los primeros beneficios del cupón se destinaron a colegios para que los niños ciegos pudieran estudiar y ganarse el futuro, no sólo vendiendo productos de juego.

Setenta años después, los datos son rotundos: la ONCE y su Fundación cierran el año 2008 con más de 118.000 empleos directos e indirectos, de los que más de 93.000 son ocupados por personas con algún tipo de discapacidad, que están integradas con plenitud en el tejido productivo y que, lejos de vivir del erario público, aportan. Ahí está nuestro éxito: ser unos más de la sociedad, también en la solidaridad que nuestro empleo supone para el resto de ciudadanos.

Por eso, que la ONCE y su Fundación sean el primer agente español por nivel de empleo y que, además, en 2008, con una situación económica convulsa, hayamos sido capaces de crear más de 3.600 empleos, supone una satisfacción para todos los que formamos esta familia.

Sólo decir ya que este modelo de la ONCE y su Fundación, absolutamente consolidado, se basa en la solidaridad de la ciudadanía española que compra nuestros productos de juego todos los días: saben que colaboran en la creación de una sociedad mejor para todos y que, cuando nos necesiten, --porque todos podemos tener una discapacidad en algún momento de nuestra vida--, nos encontrarán y nos tendrán a su lado porque nosotros, 70 años después, Seguimos cumpliendo , también en Extremadura.

*Presidente de la ONCE en Extremadura. También firma el artículo Francisco Ordóñez (Delegado Territorial).